miércoles, 24 de agosto de 2011

Soy de esas  personas que se encierra en su cuarto a llorar, de las que lloran abajo de las sabanas, que luego se mira al espejo, que agarra un pañuelo, se seca las lagrimas y se hecha aire con las manos para secar lo que quedaron de ellas, y luego comienzo otra vez a ser normal, nadie se entero de lo que paso ni tiene que enterarse, nadie puede sospechar que detrás de mi sonrisa compradora se esconde una chica frágil, muy frágil.

No hay comentarios:

Publicar un comentario